El Ayuntamiento de Cádiz desmonta un chiringuito de la playa en plena antesala del verano

Cádiz ha perdido un chiringuito en plena antesala del verano. A falta de diez días para las vacaciones escolares, que de algún modo marca la temporada fuerte de playas, el Ayuntamiento gaditano ha procedido este viernes a desmontar una de las instalaciones hosteleras que ocupa la playa.

En concreto, se trata del chiringuito Tuna Beach, ubicado en la playa Victoria a la altura de las calles Nereidas y Sirenas, en el tramo final del Paseo Marítimo; el último, de hecho, antes de llegar a Cortadura.

El Ayuntamiento mantiene con este negocio hostelero un conflicto desde hace años, habiendo intentado en varias ocasiones alcanzar un acuerdo con la propiedad por impagos del canon fijado en su día. Finalmente, este viernes se ha procedido a su retirada definitiva de la playa "por razones de salubridad y seguridad", según han trasladado fuentes municipales. De hecho, explican desde el Ayuntamiento que antes de proceder al desmontaje de la construcción se ha llevado a cabo un trabado de desinsectación al que ha seguido la retirada de toda la maquinaria existente en el interior del establecimiento, siendo el último paso el desmontaje y retirada de la playa que ha tenido lugar este viernes. Todo ello porque según precisan desde el Consistorio la instalación llevaba ya tiempo sin actividad ninguna, habiendo tenido que optar finalmente por esta fórmula de eliminar la construcción en lugar de otras posibilidades como transferir la titularidad a otros que pudieran estar interesados en esta actividad hostelera.

Con ello, pierde la ciudad uno de sus chiringuitos de playa justo cuando va a dar comienzo la temporada de verano (porque la de playas realmente arranca cada año el Domingo de Ramos). De hecho, la playa Victoria se queda sin negocios de hostelería en la arena desde la altura de la calle José García AGulló (donde se mantiene abierto el Bebo los Vientos) hasta ya iniciada la playa de Cortadura (con el chiringuito Moana Beach).

Las fuentes municipales consultadas han afirmado que se trata de un caso aislado, sin que a día de hoy esté previsto retirar ningún otro módulo hostelero de las playas de la ciudad.